Redacción
Distrito Federal. 12 de enero de 2015.- El Gobierno de la República confirmó que será este 2015 cuando inicien los trabajos de infraestructura del nuevo aeropuerto de la ciudad de México, que estará situado en terrenos del exlago de Texcoco, en el Estado de México, y cuya puesta en marcha se tiene prevista para 2020.
El director general del proyecto aeroportuario en Texcoco, Manuel Ángel Núñez Soto afirmó que para este año se tiene contemplado ejecutar 35 procesos de licitación, cuyas obras estarán vinculadas al movimiento de tierras, introducción de drenaje, vialidades de acceso, interiores, obras de alimentación de la CFE y acciones vinculadas con el agua.
Al encabezar una conferencia de prensa sobre la transparencia y rendición de cuentas del nuevo aeropuerto, Núñez Soto aseguró que hasta el momento se han alcanzado los avances previstos para 2014. “Ya estamos arrancando con un presupuesto para este año”, añadió.
Insistió junto con otros funcionarios federales, que al tratarse de la obra de infraestructura de mayor relevancia para el sexenio peñista, también se buscarán las mejores prácticas en la transparencia y rendición de cuentas en la ejecución del proyecto aeroportuario.
“Será una referencia de sustentabilidad, una obra de visión integral, de presente y de futuro, va más allá de muchos gobiernos que deberá estar presente en la vida de los mexicanos. Será la obra más transparente en el uso de recursos públicos”, afirmó.
El también exgobernador de Hidalgo explicó que la obra de infraestructura del nuevo aeropuerto de la ciudad de México proyecta la ejecución de recursos superiores a los 120 mil millones de pesos, pero que agregado a obras complementarias, alcanzará un gasto público de 169 mil millones de pesos.
“Será el empleador más importante del país y la obra de infraestructura más importante del sexenio. Entre empleos directos e indirectos se tienen previstos 160 mil empleos”, agregó.
Recordó que será un aeropuerto que contará de inicio con tres pistas de aterrizaje, con capacidad para movilizar a 50 millones de pasajeros anuales en una extensión de 4 mil 430 hectáreas, aunque se tiene previsto que pueda tener una terminal adicional y tres pistas más. “El resto es crecimiento. Y se irá dando de conformidad al crecimiento propio del aeropuerto”, comentó.
En tanto, el vocero presidencial Eduardo Sánchez informó que en materia de transparencia sobre el nuevo aeropuerto, la sociedad tendrá a su alcance dispositivos para conocer el avance de las obras, el cómo y en qué se invierte el dinero de la misma.
Por su parte, la subsecretaria de transporte, Yuriria Mascott subrayó que para el gobierno de la República resulta relevante en la ejecución de los grandes proyectos, entre los que destaca el nuevo aeropuerto internacional de la ciudad de México y el relanzamiento de licitación del tren México – Querétaro, garantizar la transparencia, la rendición de cuentas y el acceso a la información.
La funcionaria federal detalló que la semana pasada, a fin de fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) suscribieron un acuerdo sobre nuevas prácticas en la materia.
La organización internacional desarrollará un mapa de riesgos en los procedimientos de contratación y sugerirá las mejores prácticas de transparencia, además de que realizará recomendaciones durante su ejecución.
“Construiremos las obras de infraestructura que el país necesita con plena legitimidad”, finalizó.
