En el vecino estado de Michoacán azota la violencia. Para el Estado de México la situación debiera tener preocupados y muy ocupados a las autoridades. Las cifras no son nada halagadoras. Las ejecuciones son permanentes y parte de una estadística fija para los mexiquenses. Han dejado de ser, desde hace mucho, los casos aislados que justificaba la autoridad. Es innegable que aquí existe una lucha por la plaza.
El Estado de México representa política y económicamente un sitio estratégico. En la disputa del crimen organizado no es la excepción. Situado en el centro del país, y con un mercado de consumo abundante. Las policías locales simplemente no son confiables. Ahí está la razón de ser del Mando Único hasta ahora inoperante o al menos insuficiente, ineficiente. La zona más inhóspita, es la región sur, colindante con la Tierra Caliente de Michoacán donde se padece de ingobernabilidad.
A la fecha, Eruviel Ávila ha sido omiso sobre los hechos que ocurren en la colindancia. Ni apoyo, ni reprobación, ni condena. Ha pasado de noche la criminalidad que ha acaparado las ocho columnas de los principales diarios. El mexiquense está en su propia agenda, en sus propios intereses y prefiere no sudar calenturas ajenas. Sin embargo, la extensa frontera que comparte el estado con Michoacán, exige al menos, un pronunciamiento.
————
Aprobada la miscelánea fiscal en el Senado de la República, toca el turno a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, el ajuste inmediato para armar el Presupuesto de Egresos de la Federación. La tarea poco sencilla estará a cargo del mexiquense, José Manzur Quiroga. El priísta, representa el alfil político de Peña Nieto, para cuadrar sus finanzas en el paquete presupuestal del año entrante. Beltrones es mero espectador de cifras.
La poderosa comisión de Presupuesto, que antes presidió Luis Videgaray, ha recibido ya observaciones sobre las prioridades de la Secretaría de Hacienda. Atrás quedó la pasarela de gobernadores y funcionarios por los pasillos de San Lázaro. Evitar subejercicios fue la lección aprendida en 2013. Pero el próximo año no será sencillo en lo económico. El crecimiento no superará los 3 puntos porcentuales según estimaciones.
Frente al panorama desalentador, la baja recaudación fiscal, la rasurada reforma hacendaria y la incertidumbre de la reforma energética, Luis Videgaray le ha apostado al endeudamiento. Lo que evitó en el Estado de México y se planteó como titular de Hacienda se volvió insostenible. El gobierno federal debió recurrir a pedir prestado casi 687 mil millones de pesos para financiar sus proyectos en 2014.
