Redacción
El gobierno del Estado de México decidió enviar a cientos de policías a San Francisco Xochicuautla a resguardar una asamblea en la que los comuneros afines al proyecto carretero de la autopista Toluca-Naucalpan, discutirían en qué se aplicarían los 4 millones 700 mil pesos que les entregó la administración estatal por concepto de contraprestación por ceder sus tierras.
Los uniformados tenían la encomienda de evitar que por cualquier motivo alguien ajeno a la asamblea pudiera ingresar al inmueble que alberga la delegación municipal, donde se realizaba la reunión con unos 170 comuneros.
Un día antes, el domingo, más de 700 pobladores de San Francisco Xochicuautla llenaron ese mismo lugar para refrendar su rechazo a la autopista, pues consideran que el daño ecológico que causará en el Parque Otomí –Mexica, y en el llamado Bosque de Agua –ambos considerados Áreas Naturales Protegidas—será irreversible.
Pero los pobladores no sólo reiteraron su oposición al proyecto sino también desconocieron a sus representantes comunales, (presidente, secretario, tesorero y dos vocales del comisariado comunal) por no defender las tierras de la zona y en cambio entregarlas por unos cuantos pesos al gobierno para que se construya la autopista.
“De ese tamaño es su temor que mandan a más de 500 policías a resguardar a menos de 200 personas. No les basta con las decenas de elementos que mandaron a cuidar a los topógrafos para que no se impidan los trabajos en el monte, sino ahora cuidan a quienes les han comprado la conciencia con unos cuantos pesos”, afirmó uno de los pobladores que se opone al proyecto carretero.
Un numeroso grupo de pobladores de San Francisco Xochicuautla, que se ha unido al Frente de Pueblos en Defensa de la Madre Tierra, se mantiene firme y dice que de ninguna manera van a permitir que la carretera se termine en el trazo proyectado, porque representaría derribar más de 10 mil árboles de estas zonas protegidas.
“Si quieren autopista que la hagan, pero que no pase por el bosque y menos implique su destrucción. Que le den vuelta al cerro que nada les cuesta”, explica Hortensia, quien desde hace 54 años vive en esta comunidad enclavada en la serranía que divide el valle de México con el Valle de Toluca.
Al interior de la asamblea 102 comuneros votan por ejecutar algunas obras con el dinero que les dio el gobierno; 64 se abstienen e insisten en que deben tomar parecer al resto de la comunidad.
En otro inmueble, los opositores a la autopista preparan un nuevo recurso jurídico para detener el proyecto. Insisten en que empresa Autovan S.A de C.V. quien construye la carretera viola una orden judicial, luego de que un juez de distrito concediera a los pobladores de Xochicuautla una suspensión provisional de los trabajos, en tanto no se resuelva el fondo del juicio de amparo promovido por la comunidad.