Redacción
Derivado de la recomendación que emitió el pasado 8 de julio la Comisión de Derechos Humanos del estado de México, la Procuraduría General de Justicia de la entidad retomó las denuncias que a finales del año pasado iniciaron padres de familia en contra del profesor Raúl Felipe Hernández Sánchez, a quien acusan de actos libidinosos y maltratos físicos en contra de 28 alumnos de una primaria del municipio de Chapultepec.
Fue así, que la noche del miércoles, agentes ministeriales pudieron capturar al maestro, muy cerca de su domicilio en Toluca, a quien le encontraron en posesión de marihuana, por lo que también le fincarán delitos contra la salud.
El profesor fue ingresado la tarde de ayer al penal de Santiaguito en Almoloya de Juárez, desde donde enfrentará los procesos por abusos, actos libidinosos, lesiones y lo que resulte, en agravio de los menores, además de delitos contra la salud en su modalidad de posesión de droga.
Fue a finales del año pasado cuando padres de familia denunciaron las conductas inapropiadas del profesor Hernández Sánchez al director de la escuela primaria, sin embargo éste nunca investigó, ni quiso dar parte a las autoridades.
Después los padres de familia fueron al ministerio público, donde muy lentamente se dio trámite a la investigación. Pero fue la Comisión estatal de Derechos Humanos, quien se metió de lleno al asunto y pudo comprobar que Hernández Sánchez abusaba de los niños de cuarto, quinto y sexto de primaria durante las prácticas de la banda de guerra.
El organismo comprobó que Hernández Sánchez “solía tocar en los brazos, hombros, pechos, cintura, genitales y glúteos a los alumnos, durante sus clases. Además se constató que los encerraba en una bodega, les tomaba fotografías y enseñaba imágenes y dibujos de personas desnudas; les incitaba a desnudarse, mientras que a las alumnas recurrentemente les levantaba la falda y desabrochaba la blusa”. También el organismo acreditó que el sujeto maltrataba física y psicológicamente a los alumnos de cuarto, quinto y sexto año que se negaban a desnudarse o tocarse.
A pesar de que en la recomendación de la Comisión de Derechos Humanos también se señala al director de la escuela Sergio García Portilla, como responsable de omisiones porque nunca inició una indagatoria a pesar de las quejas de padres de familia, y por no haber dado aviso a las autoridades, el procurador del estado informó que no se tiene acusación formal en su contra.