Redacción
El chofer de la pipa que el pasado 7 de mayo volcó y explotó sobre la autopista México- Pachuca, dejando un saldo de 26 muertos y más de 30 heridos, rindió este lunes su declaración de los hechos, ante un agente del ministerio público, que se trasladó al hospital Magdalena de las Salinas en el Distrito Federal para recabar su testimonio.
El conductor de la unidad siniestrada, responde al nombre de Juan Manuel Díaz Olivares, quien ha sido identificado por las autoridades mexiquenses, como el principal responsable de la tragedia que ocurrió la mañana del 7 de mayo en la comunidad de San Pedro Xalostoc en Ecatepec.
Una vez que el fin de semana fue trasladado del área de terapia intensiva a un cuarto del hospital capitalino para continuar con su recuperación, Díaz Olivares, ya estuvo en condiciones de declarar ante la autoridad lo ocurrido ese día.
Se espera que en los próximos días, y conforme su estado de salud lo permita, pueda ser trasladado al penal de Chiconautla en Ecatepec, desde donde habrá de enfrentar un proceso penal por homicidio imprudencial, lesiones, daño en los bienes y lo que resulte.
Sobre Díaz Olivares pesa una orden de aprehensión girada por un juez de Ecatepec, luego de que los peritajes elaborados tras el accidente, indicaran que éste fue provocado por la impericia e imprudencia del conductor de la unidad, que presuntamente conducía a exceso de velocidad.
Aunque no trascendió el contenido de la declaración que rindió ante el ministerio público, se supo que respondió a preguntas muy puntuales de la autoridad ministerial sobre la forma en cómo ocurrieron los hechos.
La empresa gasera no le brindó asesoría jurídica, por lo que se presume que el chofer deberá enfrentar su responsabilidad sin el apoyo del empleador.