Redacción
Pobladores de San Mateo Otzacatipan, una delegación ubicada al norte del municipio de Toluca, dieron ayer un ultimátum al párroco de la localidad, Daniel Valdés para que abandone la comunidad en un plazo no mayor a 24 horas, porque de lo contrario “no respondemos”, amenazaron.
Enfurecidos por los resultados que dejaron la elección de los Consejos de Participación Ciudadana (Copacis), exigieron la repetición de los comicios, ya que a su decir, el padre Valdés operó para que la planilla Verde, encabezada por Laura Flores ganara la contienda.
Horas después de que el gobernador del estado, Eruviel Ávila señalara que no se permitirá en el estado que nadie bloquee calles, avenidas o carreteras, afectando a terceros, los pobladores de Otzacatipan, retaron a la autoridad y por espacio de dos horas y media se apostaron en el cruce de las avenidas López Portillo y el Boulevard Aeropuerto.
El bloqueo ocasionó severos asentamientos sobre la carretera Toluca- Naucalpan, que obligaron a la autoridad a hacer cortes de circulación y desviar a los usuarios hacia Lerma. Los vecinos del conjunto habitacional “Los Héroes” tuvieron que caminar largas cuadras porque no había forma de llegar a sus hogares.
A pesar de que la policía municipal y estatal les conminaron a levantar el bloqueo estos lo sostuvieron. Las autoridades se convirtieron en ese momento meros espectadores.
La alcaldía les prometió una mesa de negociación para darle salida al conflicto y fue entonces que se retiraron de las avenidas, pero acudieron a la iglesia de la comunidad para lanzar el ultimátum al párroco, que desde temprano se refugió en la Diócesis de Toluca.
