Unos no pueden y otros no quieren. La realidad es que solo una de los ocho candidatos al Senado de la República por el estado de México se encuentran haciendo campaña electoral. La priísta Ana Lilia Herrera Anzaldo, inicio sus actividades proselitistas desde el primer minuto del pasado vierne,s en la sede estatal del PRI, y diariamente  realiza dos y tres eventos por el territorio mexiquense en busca del voto del electorado. Su compañera de fórmula, María Elena Barrera, aunque ha querido sumarse de lleno a la campaña, no ha terminado de solventar todos los requisitos para que el Instituto Federal Electoral (IFE) le conceda su registro  y con ello le permita realizar actividades proselitistas. Eso sí, María Elena se ha convertido en el ajonjolí de todos los moles en los registros de los candidatos priistas, para hacerse notar. La ex secretaria particular de Enrique Peña Nieto acompañó a Carolina Monroy, a su inscripción como candidata a la presidencia municipal de Metepec, y ayer se hizo presente en el registro de Martha Hilda González Calderón como aspirante priísta a la alcaldía de Toluca. Mientras no hace campaña, Barrera Tapia ocupa su tiempo en grabar promocionales, y en aprobar la propaganda que colocará en todo el territorio mexiquense. También  se ha dado espacio para tomar cursos de manejo de medios. Pero los que de plano no se ha conocido alguna actividad, es de los candidatos de la coalición de izquierda que integran el  PRD- PT y Movimiento Ciudadano y de los abanderados del PAN al Senado de la República. Alejandro Encinas, registrado en la primera fórmula al Senado de la República, por la coalición de Movimiento Progresista, solo acudió a una cena que organizó el PRD en Naucalpan para el arranque de la campaña la noche del jueves. Encinas estuvo menos de una hora en el lugar, y después se retiró. Su compañero de fórmula, Emilio Ulloa, coordinador del Movimiento Regeneración Nacional en la entidad, no ha acudido a ningún acto público. En la oficina de campaña de Encinas se informa que el candidato dedicará esta semana a tener reuniones privadas con la estructura de los tres partidos para definir la estrategia de campaña, pero de Ulloa, nadie sabe a qué dedica su tiempo libre. Por el PAN, Oscar Sánchez ha decidido retrasar un poco su arranque de campaña, hasta que su compañera de fórmula, Laura Rojas, inscrita, de última hora como candidata en lugar de Gustavo Parra, para cumplir con la cuota de género, termine de resolver algunos pendientes con el IFE. En el Panal, la diputada Lucila Garfias, quien encabeza la fórmula para el Senado, ha estado más ocupada en resolver problemas inherentes al registro de sus compañeros a las diputaciones federales y en negociar con el PRI, los términos de la coalición que formarán para enfrentar el proceso local. En total ya suman cinco días de que se abrió el plazo para hacer proselitismo  y para los aspirantes al Senado de la República las campañas han pasado de noche. O de plano la ven perdida o apuesta a la estrategia de colgarse de los votos que le puedan generar sus candidatos a la presidencia.