Toluca, Edomex; 4 de agosto de 2020.- El futuro político de Morena está cerca. De manera urgente, la clase gobernante hará todo lo posible para tener nueva dirigencia nacional y estatal antes de que inicie el proceso electoral federal -en el mes de septiembre-. La Comisión de Honor y Justicia ordenó al Comité Ejecutivo Nacional emitir de manera urgente una convocatoria para elegir a sus dirigentes: el método decidido sería una encuesta dirigida a la militancia, lo que evitaría aglomeraciones frente a la pandemia, limitaría las trifulcas experimentadas en distintas asambleas el año pasado y favorece a los grupos más cercanos al lopezobradorismo y a los fundadores del partido.
Este martes, en la Ciudad de México se tiene previsto que Alfonso Ramírez Cuellar encabece una sesión urgente del Comité Ejecutivo Nacional -que asumió de forma interina en sustitución de la mexiquense, Yeidckol Polevnsky-. Con urgencia, se lanzaría la convocatoria para elegir su dirigencia nacional. Y en cuestión de días se deberá organizar la encuesta entre militantes, que muy probablemente favorecería a Bertha Luján, quien asumiría el control de Morena hacia la definición de candidaturas de 2021.
Para el caso de las dirigencias estatales, prevalece la indefinición. Hasta este momento, se desconoce si se llevarán a cabo asambleas distritales y una estatal para elegir a su comité local, o bien, también buscan una salida fácil por vía de una encuesta.
Ahora bien, si fuera una encuesta abierta, Higinio Martínez tendría altas posibilidades de convertirse en presidente del morenismo local. En contraparte, si la encuesta es sólo entre militantes, los Puros que lidera Daniel Serrano fortalecería sus aspiraciones partidistas.
Si Higinio logra el dominio de Morena en el estado, tendría manga ancha para repartir las candidaturas para los suyos: la reelección de muchos depende de la dominancia del GAP en las decisiones locales. Si los Puros logran la dirigencia estatal, habrá caras nuevas entre los candidatos, y muy posiblemente la exclusión de expriístas y expanistas que consiguieron el triunfo en las urnas de la mano del efecto López Obrador.
Morena lleva sin dirigencia en el Estado de México casi dos años. No hay cabeza en el partido ni quién organice las estructuras. Un pesado handicap a meses de inicial un proceso electoral.
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El PAN ya se alista para la batalla electoral. En el discurso, alcaldes y diputados locales panistas ya han lanzado una estrategia de contraste ante las decisiones del gobierno federal. Se convertirán en los próximos meses en la única oposición visible desde la legislatura local; y en una reivindicación ideológica desde las alcaldías que presiden. Temas hay varios: la contingencia sanitaria, la cruenta violencia, la pérdida de empleos y hasta el clientelismo de los programas sociales. Su apuesta es ganar adeptos frente al buen trato entre PRI y Morena.
Vendrán meses de profunda confrontación hacia el mes de septiembre. Por un lado, López Obrador rendirá el segundo informe de su mandato y primer tercio de su sexenio. En la otra acera, Alfredo Del Mazo llega a su tercer informe y la mitad de su gestión. El panismo ha decidido que los comicios intermedios se conviertan en la antesala de la elección por la gubernatura.
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