Toluca, Edomex; 5 de marzo de 2020.- Desde la Secretaría de Finanzas del Estado de México se ha dado la instrucción de permitir a todas las trabajadoras mujeres a faltar el próximo lunes 9 de marzo. A nivel municipal, algunos ayuntamientos también han expresado su respaldo al movimiento “Un Día sin mujeres”. Y se estima que desde los Poderes Legislativo y Judicial exista una adhesión de apoyo a las mujeres. Sin embargo, la protesta social pierde sentido cuando desde las altas esferas del poder se “autoriza” el ausentismo.
En tanto, en la Universidad Autónoma del Estado de México sigue el paro en distintas facultades. Las denuncias crecen en otros espacios. Desde la rectoría se lanzan señales en contra de profesores. En medio del conflicto, no se ve la luz al final del camino. Las protestas se advierten pulverizadas. Lo cierto es que, poco ayudan al rectorado, la burocracia universitaria -principalmente mujeres- quienes insisten en criminalizar a las paristas. No hay empatía, menos sororidad.
——————-
Cómo estará el priísmo mexiquense falto de liderazgos, que en tiempos de renovación sus máximos representantes son César Camacho y Arturo Montiel. La clase gobernante, que antes veía en el hankismo un ejemplo a seguir, ahora tiene en Camacho y Montiel sus referentes de identidad. Ayer, al primero, la dirigencia nacional le entregó una presea por su trayectoria política. Al segundo, el priísmo mexiquense lo vitoreó en un evento partidista. La corta memoria sorprende, y hacia afuera indigna. Por eso, desde todos los frentes, hay que “echarle la culpa al PRI”.
—————
El Partido Verde competirá en las elecciones del año próximo sin alianzas. En solitario buscará no sólo conservar su registro. Los espacios que pueda ganar, particularmente en la Legislatura estatal, le convertirán en un partido bisagra para votar en bloque con el gobierno en turno. De ahí, que muchos priístas mexiquenses sigan migrando u operando desde la acera ecologista. Los Alcántara, los Osornio, los Miranda y los que se acumulen, tendrán ahí su vía de acceso a los cargos de elección popular.
—————–
Desde el pasado domingo, el delmacismo está de plácemes. El diputado priísta, Juan Millán se convirtió en presidente de la mesa directiva durante los próximos dos meses. El mandatario estatal se siente cómodo. Millán es una hechura política del gobernador en turno. Hace más de una década lo hizo secretario del Ayuntamiento en Huixquilucan; impulsó su carrera como diputado local hace ocho años, y lo nombró secretario de Educación al arranque del sexenio. Aunque por sesenta días, Juan Millán encabezará todos los eventos públicos junto a su tutor político.
Comentarios a contacto@archivo.planamayor.com.mx