Toluca, Edomex; 22 de agosto de 2019.- Los priístas andan muy nerviosos. Algunos sufren ataques de ansiedad. Hay un puñado de militantes, identificados con la clase gobernante, que aspiran a dirigir al partido en el estado. Filtran fotografías a la prensa para mostrar su músculo. El “fuego amigo” pretende incidir para descarrilar a sus adversarios. Entre los priístas asumen que la contienda interna es ahora, porque una vez que llegue la convocatoria, habrá «dados tan cargados», que la consulta a la base será una simulación. El paradigma de Alito y su elección unánime es un ejemplo de ello.
Este jueves, por ejemplo, Alejandra del Moral se ha organizado una “sorpresa” con motivo de su cumpleaños. Se bajó la línea para que sus colaboradores en el comité estatal priísta le hicieran un video de felicitación en redes sociales. A través de WhatsApp, quienes pretendieran quedar bien con la aún dirigente, debían enviar un breve video, grabado en vertical y enviarlo antes de las 6 de la tarde de ayer. Ya por la noche se editaría el material para “viralizarlo” hoy como una especie de “cargada” digital. Esperemos no arruinar la ¡sorpresa!
El alcalde de Villa Victoria, Mario Santana Carbajal, coincidió ayer en un restaurante con una reunión de exalcaldes de Toluca. Aprovechó el saludo a esa mesa contigua, para mostrar su “cercanía” con el exgobernador, Emilio Chuayffet; y algunos exediles, como María Elena Barrera. En las últimas semanas, el presidente municipal de Villa Victoria ha dedicado largas jornadas para andarse “placeándose” por Toluca, Huixquilucan y otros municipios. Quedan dos incógnitas: ¿en qué momento despacha el alcalde en Villa Victoria?, y la segunda no menos importante, ¿para qué se reunieron los expresidentes de Toluca?
La carta de presentación de Gustavo Cárdenas era haber sido subsecretario de la Sedatu, lo que daba muestra de su cercanía con Peña Nieto. Ahora que la Sedatu y Rosario Robles han caído en desgracia, el cacique de Jocotitlán se ha deslindado de toda estafa, y poco falta para decir que a la exjefa de gobierno capitalina sólo la conoció en los pasillos y por equivocación. Sin embargo, insiste en su intención por hacerse de la dirigencia priísta con su ascendencia en el norte de la entidad.
Juan Pedro García presume una cercanía con Alejandro Moreno que resulta ficticia. Coincidió con Alito, en una reunión que tuvo el campechano con la organización Unidad Revolucionaria hace algunas semanas. En su calidad de candidato, asistió a esa convocatoria sabedor de la ausencia de Ivonne Ortega, pero cuyo encuentro organizó Claudia Ruiz Massieu. Estuvo ahí menos de 60 minutos y salió corriendo. Entonces, Juan Pedro tomó unas fotos, y ahora simula tener cercanía con Moreno. García se ha lanzado en contra de las estirpes priístas, lo que le puede resultar contraproducente cuando se entere del nombre de la calle donde se ubica la sede priísta que pretende dirigir.
Y a propósito de las componendas del PRI, ayer Alejandro Moreno Cárdenas nombró a Lorena Piñón como secretaria de Gestión Social del CEN priísta. Se trata de la desconocida candidata, que era comparsa de Alito en los debates por la dirigencia nacional, y fustigaba a la yucateca, Ivonne Ortega. Curiosamente, Piñón logró tener representantes en todas las casillas, pero obtuvo menos votos que Ivonne. Y lo más importante, ya alcanzó acomodo a menos de quince días de la elección.
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