Redacción

Toluca, Edomex, 30 de enero del 2019.- El presunto feminicida de la niña Giselle que el pasado fin de semana fue encontrada sin vida en un paraje de Ixtapaluca, tras una semana de estar en calidad de desaparecida, es el dueño del ciber-café donde, por última vez, fue vista con vida la menor de 11 años.

De acuerdo con las indagatorias de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, la niña ya no salió del negocio el pasado 19 de enero, según se pudo constatar con las cámaras de video vigilancia  ubicadas en Chimalhuacán.

Con estos elementos, el ministerio público especializado que investiga el caso, pudo establecer una ruta de ese lugar al sitio donde fue hallado su cadáver y en el trayecto se encontraron indicios que obligaron a indagar más sobre el ciber-café.

No sólo se interrogó al dueño del lugar sino que se obtuvo una orden de cateo al inmueble donde se ubica. Ahí se pudo conocer que atrás del negocio hay una recamara donde se hallaron más indicios de que la niña pudo haber estado en el lugar.

Se descubrió una sábana del mismo bordado a la que se halló junto al cadáver y a otra que era utilizada como cortina en el ciber-café.

En el inmueble también se encontró ropa de la menor, por lo que ya no hubo duda de la presunta responsabilidad de Roberto “N”, dueño del lugar y quien fue detenido ayer.

“Vamos a pedir una pena ejemplar. Hablaré con el ministerio público para que exija la pena máxima, que es la pena vitalicia.  Llevaremos el proceso con toda la pulcritud  y apertura para que se dé una pena ejemplar y evitar que este tipo de eventos vuelvan a suceder”, dijo el fiscal.

Roberto “N”, ya fue ingresado al penal de Neza, desde donde enfrentará el proceso penal por feminicidio.

De acuerdo a la Fiscalía, este sujeto ya había estado encarcelado por el delito de portación de arma de fuego, y también se investiga si está relacionado con otros ilícitos.