Toluca, Edomex. 20 de noviembre de 2014.- Ayer la Legislatura del Estado de México pareciera haber contado con 76 legisladores. El secretario de Finanzas, Erasto Martínez utilizó las oficinas de la Junta de Coordinación Política del Congreso local para operar la aprobación en comisiones del paquete fiscal del 2015. Desde el escritorio de quien preside el órgano legislativo, Erasto convertido en un legislador más, instruyó a los diputados del PRI, PVEM y PANAL hasta donde ceder en los ajustes presupuestales impulsados por una raquítica oposición representada por el PAN y el PRD.

Tras escasas cuatro horas de negociación, la mayoría aplastante priísta impuso las condiciones necesarias para dictaminar el presupuesto proyectado por Eruviel Ávila, y avalado por Erasto Martínez. Por la tarde, el extesorero de Ecatepec salió complacido con lo aprobado por los legisladores locales. Se prevé que este jueves, el pleno legislativo otorgue su aprobación al paquete presupuestal que apenas la semana pasada había sido presentado a los diputados mexiquenses.

La importancia en la ejecución del presupuesto del año entrante transita por las elecciones intermedias. En la medida en que Eruviel tenga el dinero suficiente para el despilfarro de programas sociales y el subterfugio presupuestal de financiar el proselitismo del partido en el poder. Las mejores cuentas que deberá entregar Eruviel el próximo año no están vinculadas con la transparencia, sino con el triunfo electoral a favor del priísmo en la tierra natal del presidente Enrique Peña.

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El montielismo sigue vigente. El Consejo Político Estatal del PRI del Estado de México eligió a Enrique Martínez Orta Flores como presidente de la Comisión de Procesos Internos para el ungimiento de candidatos el año entrante. Martínez Orta es un hombre cercano al exgobernador Arturo Montiel, quien sin dudarlo se convertirá en uno de los grandes electores del próximo año. La pasarela de los aspirantes han comenzado a visitar las oficinas particulares del exmandatario. El Montielato es tan prevaleciente como innegable.

También los priístas avalaron que la dirigencia partidista comience negociaciones para explorar alianzas electorales. Se da como un hecho, que el tricolor ratifique sus coaliciones políticas con el Partido Verde y Nueva Alianza de cara a los comicios donde se renovarán 75 diputados locales y 125 ayuntamientos. El maridaje entre los tres partidos les ha permitido repartir el ejercicio del poder político, mediante dos partidos satélite que facultan a priístas incorporarse al ejercicio de gobierno.

A propósito de egos, extrañamente en el comunicado oficial del PRI mexiquense, sólo se hace referencia a la elección del presidente de la Comisión de Procesos Internos, pero se omite el nombre de Martínez Orta, quizá para no hacerle sombra al presidente del priísmo estatal. Lo cierto es que la influencia del dirigente tricolor está tan reducida que no ha podido generar cambio alguno en el gabinete de las carteras priístas en la entidad.

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