Redacción
Jilotzingo, Edomex. 14 de mayo de 2014.- Pobladores del municipio de Jilotzingo retuvieron a 10 policías con la amenaza de lincharlos por su presunta omisión en el secuestro de una mujer identificada como Guadalupe, ocurrido la mañana de ayer martes. Enardecidos, los habitantes de Jilotzingo incendiaron tres patrullas de la policía municipal para exigir un freno a la violencia que asedia al municipio, incluida una ola de secuestros sin precedente.
Cuando los habitantes enardecidos pretendían hacer justicia por su propia mano, elementos de la Policía Estatal encabezados por el secretario de seguridad ciudadana, Damián Canales Mena, rescataron a los agentes municipales.
Canales Mena negoció con los inconformes, con quienes se comprometió a investigar la presunta participación de los policías en estos delitos.
Esta mañana una mujer de nombre Guadalupe fue secuestrada cuando iba a dejar a sus hijos a la escuela.
Habitantes del poblado de San Luis Ayucan denunciaron que hombres que iban en un auto blanco tipo Pointer o Fiesta, con vidrios polarizados, se la llevaron. El ambiente se tensó, luego de que presuntamente los policías no quisieron perseguir a los criminales.
Los familiares de la víctima denunciaron que los plagiarios les llamaron desde su teléfono celular y les exigieron 500 mil pesos para liberarla.
Los pobladores advirtieron que en lo que va del año suman al menos once secuestros en la comunidad.
De inmediato, se trasladaron a la casa del alcalde priísta, Reinaldo Torre para exigirle solución ante la inseguridad, y particularmente la ocurrencia de secuestros, donde advirtieron omisión y complicidad de policías municipales.
Otros habitantes se dirigieron a la Iglesia del lugar, donde hicieron sonar las campanas para convocar a los demás habitantes a tomar el Palacio Municipal de Jilotzingo, municipio colindante con Naucalpan.
Más tarde, decidieron retener a 10 policías municipales, incluido el director de la corporación de seguridad, Esteban Reyes Jerónimo, quien ocupa el cargo hace 15 días.
Mientras los policías permanecieron retenidos, los habitantes mantenían latente la amenaza de lincharlos. Los agentes estaban con las manos atadas en la biblioteca del pueblo.
La tensión obligó al secretario de Seguridad Ciudadana, Damián Canales a trasladarse al sitio, junto con elementos de la Policía Estatal, Federal y Ministerial para rescatar a los efectivos municipales.
En tanto, el alcalde Reinaldo Torre González dijo que en los últimos 18 meses se han registrado al menos cinco secuestros. El edil reconoció que los 37 policías del municipio resultan insuficientes para garantizar la seguridad de más de 17 mil habitantes.
A partir de ayer, en lo que se realizan las diligencias correspondientes, la Policía Estatal tomó el control de la seguridad en la comunidad.