Cuando está por finalizar el año, el recuento apunta principalmente a las especulaciones que giraron en torno al mandato de Eruviel Ávila. Mucho se insistió en que el gobernador dejaría su cargo en septiembre, cuando cumpliera dos años de gestión, invitado por Enrique Peña al gabinete presidencial. Lo cierto es que ya pasó esa barrera imaginaria, y el ecatepense parece afianzarse en un cargo para el que fue electo seis años.
Lo que está por delante para Eruviel es consolidar su grupo político. Su círculo más cercano actualmente está conformado por Erasto Martínez, Raymundo Martínez, Adrián Fuentes, César Gómez Monge, Carlos Aguilar, Ernesto Millán y Alfredo Torres. Los cambios al interior de gabinete podrían generar condiciones de lo que estará en juego en 18 meses: elecciones intermedias. Ahí, anticipadamente se diseñará la sucesión de 2017.
—————-
En los últimos doce meses, también es innegable el empoderamiento de mexiquenses en el gobierno federal. Cinco secretarías son encabezadas por paisanos al Presidente: Chuayffet, Videgaray, Ruiz Esparza, Navarrete Prida y Guerra Abud. Muchas subsecretarías de todas las dependencias, son dominadas por más y más mexiquenses. También otros organismos como la Conagua, la Conade, el Inmujeres, Diconsa y la lista es interminable.
El proyecto político del Estado de México se ha impuesto desde Los Pinos, abarcando no sólo las principales carteras del Poder Ejecutivo. También ha ampliado su influencia en el centro del PRI nacional, del Senado de la República y de la Cámara de Diputados Federal. Hoy las cartas credenciales de los mexiquenses se han instalado en el ejercicio del poder político y económico. Apenas es el comienzo con un año de ascenso al poder.
——————-
No todo ha sido positivo para los mexiquenses. El caso llamado #LadyProfeco se convirtió en uno de los temas más trascendentes en la escalada de las redes sociales. El escándalo de tráfico de influencias derivó en la irremediable renuncia de Humberto Benítez Treviño como titular de la Procuraduría Federal del Consumidor. Su carrera política se fue por la borda como corolario de un berrinche de su hija Andrea. Ese fue el saldo negativo.
Aunque originaria de Chiapas, avecindada en el Estado de México donde se forjó como líder magisterial, Elba Esther Gordillo Morales también padeció el lado oscuro del poder. Encarcelada desde el mes de febrero, la expresidenta del SNTE está acusada de “lavado de dinero” con recursos procedentes del magisterio, un sindicato que dominó por más de veinte años.