Hay dos asuntos que preocupan a Eruviel día y noche. No es Antorcha Campesina, y tampoco es su eventual salida como gobernador de la entidad. Tampoco se trata de Laura Bozzo y Carmen Aristegui. Menos inquietud le genera posibles cambios a su gabinete. Lejos están las ocupaciones electorales del 2015. Los ojos de Ávila están en algo que realmente vulnera la gobernabilidad de su mandato.
Sus profundas angustias son: la inseguridad y la economía. La delincuencia se ha instalado en el Estado de México. Hay bandas criminales que se disputan la plaza. Policías infiltradas y coludidas. Un panorama de cruenta violencia que ha perdido la capacidad de asombro. Y por si fuera poco, una lacerante impunidad de quienes delinquen. El sistema carcelario se encuentra colapsado. Y el Poder Judicial sumido en el descrédito.
En Ecatepec, tierra de origen del gobernador, se contabilizan 34 mil robos con violencia, 126 secuestros, 5 mil autos hurtados y varios asesinatos. Es el municipio más poblado del país, pero también registra casi 10 por ciento del total de los cometidos en los 125 municipios. Hace algunas semanas ocupaba el primer lugar en delitos con 73 mil 748. La tendencia no sólo es irreversible, sino que pareciera irrefrenable. Hay alerta encendida.
El asunto económico no es alentador. Al inicio de año, la expectativa de crecimiento se ubicaba cerca del 3.5 por ciento. Conforme avanzan los meses y se desploma la actividad financiera, la prospectiva de crecimiento alcanza apenas el 1.2 por ciento. Con eso los indicadores son abrumadores, en la inversión, generación de empleos, gasto público, y demás. Se requiere de ingenio para sacar del atolladero la calamidad que se atraviesa.
Por si fuera poco, las cosas no parecen mejorar repentinamente. Para el año entrante se estima un crecimiento económico de apenas 3 por ciento a nivel nacional. El Estado de México no está exento del declive financiero. Las circunstancias fiscales no parecen tener un ánimo alentador. Eruviel podrá cumplir en los próximos cuatro años sus tan presumidos 6 mil compromisos, pero no cambiará la realidad de la entidad.