Los hombres de negocios han puesto en duda el cumplimiento de los compromisos hechos por Enrique Peña Nieto en su campaña electoral. El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) calculó que para que el mexiquense lleve a cabo sus múltiples obras y acciones de gobierno requerirá incrementar sus ingresos tributarios en 80 mil millones de pesos, que implican un 20 por ciento adicionales a lo recaudado este año, y que equivale casi cuatro veces el gasto de educación en este 2012.
Las estimaciones del CCE parecen vacunar anticipadamente al mexiquense de cualquier responsabilidad, y parece un emplazamiento hacia los panistas para que se aprueben en lo inmediato las famosas reformas estructurales que posibilite el crecimiento económico y la recaudación fiscal que el país requiere. El CCE contempla que los organismos y empresas del Gobierno podrían aportar 35 mil millones pesos adicionales, y a través de deuda pública se lograrían otros 220 mil millones, considerado el tope prudente. Sin embargo, para el CCE habría un faltante de al menos 500 mil millones de pesos para ajustar el presupuesto requerido idealmente. Los hombres de negocios ultiman que sin reformas estructurales será imposible pensar en cumplir esos compromisos.
Roberto Ruiz Moronatti ha dado la cifra mágica. El ex alcalde de Coacalco que ganó en tribunales la diputación federal de Coacalco le permitirá al PRI y sus aliados políticos alcanzar 251 legisladores, que dan la mayoría simple a partir del mes de septiembre. La suma de curules le ha dado ventaja legislativa para el proyecto de Peña Nieto quien tiene claro que las reformas estructurales deberán construirse en el primer año de su gobierno, para evitar sesgos electorales en su discusión.
———
Se confirmó lo que ya estaba cantado. Manlio Fabio Beltrones va en caballo de hacienda para coordinar a los diputados federales del PRI. Ayer por la tarde, y frente a la “cargada” a favor del sonorense, se bajó de la carrera Jesús Murillo Karam. En la acera senatorial, Emilio Gamboa Patrón será el coordinador de los senadores priístas. Por más que presionó, Cristina Díaz, secretaria general del partido, no alcanzó los consensos para hacerse del cargo en la Cámara Alta.
Beltrones y Salinas degustaron las mieles del poder desde Miguel de la Madrid y se encumbraron –ambos- durante el salinismo. A propósito de salinistas, muchos ya dan por descontado a Manuel Camacho como coordinador de los senadores del PRD. Y si el PT completa cinco senadores para convertirse en fracción, apunten a Manuel Bartlett quien fue secretario de Educación salinista, como coordinador del Partido del Trabajo en la Cámara Alta. La política ficción está de vuelta.
Con Gamboa en la coordinación senatorial se descarta en el gabinete peñista. Los futurólogos colocaban al ex secretario particular de Miguel de la Madrid en la secretaría de Comunicaciones y Transportes, cartera que ocupó en el salinismo. Los momios de Gerardo Ruiz Esparza, -el alfil político del ex gobernador Alfredo del Mazo- suben en las apuestas para la conformación del gabinete de Enrique Peña. Ya anteriormente, Ruiz Esparza ha laborado en la dependencia federal.