Redacción
Una semana después de que lo pactaron con los concesionarios del transporte público, el gobierno del estado decidió oficializar el incremento a la tarifa del pasaje, de siete a ocho pesos por viaje en unidades de ruta fija.
No obstante, se informó que este costo sólo será para los primeros cinco kilómetros, ya que por cada kilómetro adicional, se le agregarán 20 centavos al precio, de tal forma para las rutas largas, la tarifa podría llegar hasta los 11 pesos.
Ayer por la tarde, el vocal ejecutivo del Instituto del Transporte, Pedro Basáñez, acompañado por 24 representantes de igual número de empresas transportistas, reveló que la nueva tarifa se aplicará a partir del sábado 18 de mayo.
Los concesionarios están obligados a traer a la vista, desde este jueves su pirámide tarifaria para que los usuarios la conozcan y el sábado se pueda aplicar, una vez que la mayoría de los ciudadanos estén enterados del ajuste.
El funcionario justificó el alza con el argumento de que durante casi cuatro años no hubo ninguna variación a la tarifa, aun cuando los insumos para los transportistas se elevaron más del 30 por ciento.
Además se ufanó de que el gobierno del estado veló por la economía de los usuarios, y no aceptó la propuesta de los transportistas de elevar el precio hasta los doce pesos, aunque públicamente, los concesionarios siempre hablaron de ajustar la tarifa hasta los 10 pesos.
Horas antes del anuncio hubo protestas por la decisión gubernamental de incrementar el precio del transporte en el estado, que es utilizado diariamente por más de 7 millones de personas para trasladarse de su casa a su trabajo o escuelas.
En Toluca, el colectivo universitario Metrobús Toluca Ya marchó por las calles de la capital mexiquense para repudiar el incremento, el cual consideran injusto e injustificable, debido al “pésimo servicio que se presta particularmente en esta ciudad”
El incremento, expresaron los jóvenes, no va a representar mayor rentabilidad para los concesionarios si sigue habiendo en esta ciudad una sobreoferta del servicio.” Antes del incremento debieron pensar en un verdadero reordenamiento que sacara de las calles a todos aquellos camiones que viajan prácticamente vacíos”
También el Partido de la Revolución Democrática (PRD) expresó en un comunicado de prensa su rechazo al incremento, ya que lesiona la debilitada economía de los mexiquenses. El PRD indicó que la inmensa mayoría de los habitantes del estado destina entre el 30 y 40 por ciento de su salario a cubrir gastos de transporte, por lo que el aumento obligará a destinar un porcentaje mayor.